Pues una gozada la cosa, como todos los años. Tener algo así en plena playa de Riazor y gratis es un caramelo más que goloso. Y si ya encima te ponen delante a grupos del nivel de Suede, la guinda está puesta. Gran concierto ayer. Brett Anderson es un maquinón. El público, mucha gente de 40 para arriba rememorando otros tiempos. Muy bonito todo.
Hoy habrá que pasarse a ver qué hacen Kiko Veneno y Los Enemigos.