[PS] INTERPOL

Setlistazo. En lo VIP vergüensita de público. Que ya llegar 5 mins antes y ponerte en quinta fila da qué pensar, pero cuando pasan dos canciones y estás más ancho que en cualquier grupo de las 5 de la tarde y a mitad de concierto ya estás delante de todo porque se va todo el mundo sentido Strokes, poseso. Como decía mi churri en Antony, "estos no están viendo/escuchando lo mismo que yo". Para mí, que nunca los había visto, gran concierto. Ayudado mayormente, como decía, por un gran setlist. El único pero ese, el público. Si diesen aunque fuese la mitad de lo que darían una hora después en el lado contrario...

Me quejo de que me miren mal por saltar estando en segunda fila de Interpol Joder, si con Evil me acuerdo que me puse a hacer el cabra (sin rozar siquiera a nadie) y al acabar había un mínimo de tres personas dedicándome las mayores caras de asco que te puedas imaginar. Y tampoco soy tan feo, eh. Y buen culo.

Del VIP no me voy a quejar, encima gratis. Ver a Interpol delante de todo (llegando, como digo, 5 mins antes después de disfrutar el semiesperpento de Foxygen hasta el final), quedarme hasta la última, ir a Strokes sin prisas y situarme cómodamente bastante delante cuando del otro lado la gente lleva esperando un buen ratazo para tener ese mismo sitio. Vamos, sería la risa protestar por eso. La putada es que, una vez probado, veo difícil volver sin VIP. A poco que quieras ver un par de cabezas, compensa absolutamente.

Si está claro, pero es que es algo más general. La gente con abono VIP suele estar, por las razones que sean, muy poco interesada en los conciertos. Que hay excepciones, claro, eso es innegable. Pero lo normal es encontrarte, además de malas miradas, gente de charleta o de espaldas al escenario incluso en primeras filas. Y claro, te pones en un concierto a priori grande como es el de Interpol y la cosa choca un huevo. Anyway, un precio justo por las comodidades ofertadas, de eso no tengo duda.

Ahora que si no hubiese tenido el abonament Vip, ya me estaría saliendo espuma por la boca de ver un espacio tan grande siempre a medio llenar.